El socio del Club de Deportes Náuticos de Villarrica, Pablo Carrasco Román, participó el último fin de semana en una regata realizada en las costas marítimas de Viña del Mar en específico en sector Higuerillas, donde junto a su hija Daniela Carrasco Orozco, se empinaron en el primer lugar de la competencia de veleros.
Con un excelente viento, típico de esta fecha en la región de Valparaíso, la dupla padre e hija, supieron sortear oleaje marino para quedarse con el cetro máximo en una jornada dominguera alegre para el Ingeniero Comercial oriundo de Villarrica y su hija estudiante de medicina, ambos amantes del velerismo que este verano surcaron todo lo que pudieron en las aguas del lago Villarrica durante las vacaciones.
Amor por la clase Pirata
La navegación en la clase pirata tiene una bella historia familiar, por cuanto tanto la madre como el padre (extintos conocidos y queridos vecinos de Villarrica Osvaldo Carrasco y Silvia Román) fueron veleristas que formaron parte de los socios fundadores del actual Club Náutico Villarrica quienes disfrutaron por muchos años en familia de esta práctica en las aguas del lago y esporádicas salidas veleristas a navegar en el mar en Talcahuano y Valdivia como también al lago Llanquihue. “Siempre recordamos con nostalgia esos años en los que las regatas eran parte de casi todos los fines de semana durante la época estival, cuando el Club tenía como sede la casa de un miembro de la directiva don Luis Rebolledo a quien recordaremos siempre con cariño, era un ‘velerista de tierra’ porque hacía todo lo que podía por apoyar al club y a sus hijos para que navegaran pero el siempre desde el puerto” comentó Pablo Carrasco con nostalgia, quien añadió que “hoy tengo la alegría de navegar con mis hijas Daniela y Rosario y desde luego con mi señora Mónica, fiel compañera tanto en vela menor como en vela mayor, con quien ganamos dos regatas realizadas en Pucón durante el verano”. El velerista aprovechó la oportunidad para felicitar a la actual directiva del Club Náutico de Villarrica liderada por Rolf Köster, quienes han reflotado el interés y entusiasmo por un deporte que no debe desaparecer sino, sumar más adeptos año tras año.
Premiación en un sitio histórico
La entrega de premios se realizó en la sede de uno de los Clubes de Yates más antiguos de Viña del Mar que data del año 1955, en Caleta Higuerillas, donde recibieron su medalla del primer lugar por parte de un integrante de la organización, el “Navegante” y su “Escotera” lucen felices con este logro y esperan entusiasmar a antiguos y futuros navegantes a disfrutar el agua con este hermoso deporte sin motores.
