VILLARRICA.- “El Clown Musical”, fue la temática que se llevó a cabo en el 4° Taller, desarrollado por el maestro Roberto Eduardo Cobian Durán en el Seminario de Formación Clown, que desde abril se está desarrollando en Villarrica, gracias al financiamiento del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes, convocatoria 2018, que busca desarrollar el arte del payaso en el sur de nuestro país.
Al igual que muchos de los alumnos participantes del Seminario, Roberto conoció el clown luego de desempeñarse como mecánico automotriz y decidió entrar a estudiar teatro en la universidad ARCIS, donde conoció esta rama artística, que actualmente lo ha llevado a participar de diversas obras y escenarios teatrales como musicales por medio de su banda de rock clown La Ciscu Margaret, entre otros oficios de las artes escénicas y la gestión de actividades culturales y artísticas.
Su clase estuvo enfocada en un Taller de Clown Musical para los participantes, quienes tuvieron que sacar el payaso musical que llevan dentro, todo esto como parte de la formación y conocimiento que están teniendo de cada una de las ramas que involucra al arte clown, con objeto de que encuentren, descubran y conozcan el payaso que cada uno de ellos lleva dentro.
Asimismo, Roberto comparte con los alumnos con su payaso Polpaico y les enseña la importancia de descubrir que el payaso que ellos descubran sabrá todo de ellos, incluso a veces más que ellos mismos. Por esta razón, es importante ser sinceros y ser ellos mismos. Polpaico, es el payaso que más ha acompañado a Roberto y con quien más alcanza el sentido de que “el clown está en ti mismo, y debes encontrar en ti mismo las características de tu personalidad que llevarás al límite de la excentricidad”, comenta. El Polpaico es un payaso muy chileno, cercano a situaciones cotidianas del clásico chileno que todos llevamos dentro. “Es un maestro chasquilla, escenógrafo que trabaja en el teatro y a veces, por ejemplo cuando no llega el presentador al Polpaico le toca asumir ese rol, sin tener problemas… Él tenía todo listo de antes y estaba esperando que le pasara una oportunidad como esta”, comenta entre risas Roberto.
Para él, el payaso es un estado al cual se accede voluntariamente, y el que poseemos todos los seres humanos, todas las personas, es lo más liberador, lo más fiel, lo más fidedigno, de lo que es o puede llegar a ser nuestro ser humano. Ser payaso es la profundidad y la superficialidad al mismo tiempo. Todo esto es lo que se encuentra en el payaso, agrega.
“Es motivante participar en un seminario como este por el hecho de formar parte de un equipo que esté interesado en compartir la felicidad y buen vivir por la humanidad e ir viendo como todos mis compañeros, tanto profesores como alumnos, están tan interesados en que podamos hacer lo que queremos, ser felices y vivir de buena manera, logrando desarrollar nuestras diversas habilidades como seres humanos creativos y participativos, bondadosos y generosos: personas humanas”, señala.
Al ser consultado respecto a qué espera recibir de los participantes de esta taller Cobian, señala: “del grupo de alumnos de esta escuela espero poder recibir mucho de ellos, que vengan, que estén con ganas, que sean personas disponibles, personas con intenciones de aprender y de participar y de hacer un cambio en este sistema que nos tiene tan reprimidos y esclavizados y ciegos. Espero que no bajen los brazos, que sigan con sus convicciones y sus deseos de hacer de esto una vida mejor”.
Además, indica que le encantaría dejarles como “regalo” la motivación y la certeza de que este es maravilloso y muy valioso de recorrer, que se den cuenta de eso y reafirmen que es posible hacer las cosas de una manera diferente, bella y muy acertada para ser felices.